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El proyecto de ley que se presenta a la camara tiene como objetivo fundamental sustituir el régimen de filiación actualmente vigente por otro, que termina con las diferencias entre hijos legítimos e ilegítimos y que establece un trato igualitario para todos los hijos, cualquiera sea la situación legal entre sus padres al momento de la concepción.

El proyecto Elimina la diferenciación entre los hijos que han nacido dentro o fuera del matrimonio, estableciendo un tratamiento igualitario en todos los aspectos (sucesorales, de alimentos y en los efectos propios del estado filiativo). Así, el proyecto a que aludimos intenta articular un sistema legal coherente con aquella igualdad ante la ley que la Constitución asegura a todas las personas y con el antedicho mandato de no establecer, por ley ni autoridad alguna, diferencias arbitrales. Consagra, asimismo, el principio de la libre investigación de la paternidad y de la maternidad. El desafío que este principio ofrece, por regla general, es lograr equilibrar dos criterios fundamentales, que suelen aparecer como contradictorios: el derecho a la búsqueda de la verdad y, por otro lado, la preservación de la paz y de la armonía familiar. El proyecto del SERNAH visualiza ese peligro y recoge, pues, la idea de un control preliminar de viabilidad de la demanda.